La Importancia de una Visión Común

Othón Osorio • 5 de diciembre de 2019

¿Por qué es importante tener una visión común?


Estamos en cierre de año, y muchos de nosotros, en lo personal o en nuestros equipos de trabajo, estamos visualizando y alineando nuestros objetivos del siguiente año, ¿cuál es la importancia de esa alineación? Todo estriba en la información y cómo lograr una mayor resonancia. Veamos. 

La información se transmite a través del espacio-tiempo en forma de una onda. Estas codifican y transmiten la información. Cuando se crea una interferencia, es decir, cuando dos (o más) ondas se superponen, se 'amplifica' o se 'cancela' su señal. Si dos ondas están sincronizadas, es decir, sus puntos altos y bajos (crestas y valles) coinciden, se creará una "interferencia constructiva" (1). Es decir, la alineación respecto a una visión, generará un efecto multiplicador que transmitirá en nosotros y en nuestro equipo una mayor confianza y fuerza, que redunda en motivación y energía para el logro de la meta. 

Si dos ondas no lo están, y si estuvieran digamos en momentos opuestos en el momento de la interferencia, se cancelan, se crea una "interferencia destructiva" (1). Es decir, la polarización de las posiciones, la falta de acuerdo y de alineación, generan un proceso de inacción en donde la disposición, incluso a nivel celular, de nosotros mismos, no suma al cumplimiento del plan o de los objetivos. Y no se trata de estar siempre de acuerdo. Se trata de sintonizarnos y de encontrar un punto en donde se logre consolidar una visión común.

Estar en coherencia, congruencia y alineación es fundamental para la elaboración de nuestros planes. Coherencia entre nuestras sensaciones, emociones y pensamientos. Es decir, que la visión o ideas propuestas nos hagan click en cada parte de nuestro ser y que generen unidad en nosotros mismos. Congruencia en la acción que se propone en relación con nuestro sistema ético y la naturaleza de las cosas. Alineación, que nos lleve a la convicción de poner nuestro tiempo, talentos y vida al servicio de una causa, un equipo, una meta. 

Esto, al final de cuentas, nos lleva a AMAR lo que hacemos, cómo lo hacemos, y en consecuencia a ABRAZAR lo que SOMOS. Y entonces, el poder del amor, no sólo nos da paz, sino que amplifica la señal de la información original y contagia, convence, inspira, RESUENA. En el poder de la visión, reside pues, la magia del Liderazgo. Y esto funciona a todos los niveles, en lo personal, en el trabajo, en un país, en el mundo.

De todo corazón, que sus objetivos y metas para 2019, estén en coherencia, congruencia y alineación, para que en AMOR logren todo lo que se propongan. Y que cada una las ondas que cada uno emita, lleven esta información de un lado a otro, y coincidan con las de los demás, para la construcción de una interferencia constructiva en nuestro mundo, en buena onda.

(1). McTaggart, Lynne. El Campo. En busca de la fuerza secreta que mueve el universo. Sirio Ed.